Como decir que no, es tener claro que quieres y para que lo quieres. Es saber que estás en tu agenda y no en la agenda de los demás. Toda esta reflexión viene por qué estos días tengo por aquí a mis dos primos. En realidad más que primos son como mis dos hermanos ya que estamos muy unidos, aún a pesar de estar repartidos por el mundo. Hoy en día nos ayuda mucho las nuevas tecnologías para estar al día de lo que nos va pasando. Mi primo-hermano vive en México con su mujer y sus dos retoños guapísimos y mi prima-hermana vive cerca de Paris con su marido y sus dos preciosos niños. Cuatro sobrinos que me tienen el corazón robado 😊
Contenido
Todos estamos de vacaciones
Durante estos días está la familia, están amigos que vienen de vacaciones, amigos de amigos que esperan que estés por ellos ya que están allí de vacaciones y han venido a verte y que desean que vayas a tomar algo, que les hagas de guía, que les aconsejes sobre donde ir, donde comprar, hacer el aperitivo, ir a ver un espectáculo.
Cada uno de ellos con su propia agenda, expectativas y que lo hacen de buen corazón y para estar contigo.
Tantas agendas diferentes ha causado un pequeño choque. Y, sobre todo mi prima, ha terminado estresadísima. Intentar estar con todo el mundo y para todo el mundo no es posible (a menos que tengas el don de la ubicuidad).
Y lo más importante, al final te olvidas de ti, de tu agenda. De lo que tú realmente quieres, deseas, de lo que te hace a ti feliz, de lo que has venido a hacer.
Decir que si.. cuando en realidad es un no
Como decir que no, puede resultar complicado si no tienes claro tu foco, tu agenda y tus valores. El «para que» haces las cosas.
Seguro que más de una vez te has encontrado en esta situación:
– Has aceptado una tarea en el trabajo cuando ya estás hasta las cejas de trabajo, lo que te ha llevado a trabajar el fin de semana
– Dices que si a una cena para no quedar mal cuando en realidad te hubieras ido a dormir a las 9 de la noche
– Te pasas toda una tarde de sábado ayudando al amigo del vecino porqué es tu vecino y no sabes como se lo va a tomar
– Has cambiado tus planes por una amiga que te pide que la acompañes cuando tu odias este tipo de película y lo haces por no herirla.
Y lo peor, es que al final te enfadas contigo porqué allí no estás bien, al que dejas de lado (pareja, amigo, tu película, tu paseo o lo que sea) también de alguna manera se está quejando por tu falta de atención. A él si, a mi no… y tú entras en un círculo realmente complicado en donde no sabes donde ver la salida.
¿Porqué nos pasa esto?
Porqué decimos que si cuando en realidad hubiéramos dicho un no.
En la superficialidad estás diciendo que SI cuando querrías decir que NO cuando:
- Quieres quedar bien con esa persona (aunque no nos demos cuenta a que estamos renunciando)
- Por el que dirán (esa cabecita que te da vueltas: que dirán… pensarán eso, o lo otro…)
- Por que no sabes enfrentarte a una situación y no encuentras argumentos al no.
Hay personas que saben utilizar muy bien la manipulación, la queja o la exigencia y si no te enfrentas a ello el que terminas estresado y con sentimiento de culpa eres tú.
Que hay detrás de todo esto
Como decir que no, y sentirte feliz y con tranquilidad, es un trabajo que requiere Conocimiento y Consciencia.
Cuando dices que No a algo, si sabes que hay detrás, si tienes tu foco bien puesto, todo alineado. Sabrás y discernirás a qué dices que No y como actuar.
Creencias del tipo la familia lo aguanta todo, si eres amable eres buena persona, un buen trabajador no dice que no a su jefe… y un largo etcétera han hecho mella en algunas mentes para quedarse. Y muchas veces juegan malas pasadas.
A quien dices que NO
Tenía un cliente que, SEGÚN EL, decía que no muy a menudo. Comentaba que ese NO era su problema, él decía que no a muchas cosas.
Cuando empezamos la sesión se dio cuenta de algo importante: el NO se lo decía a su familia, a su mujer, a sus padres, a sus hobbies, a su gimnasio. Tenía un elevado nivel de estrés, continuas discusiones y una sensación interna de dolor (según sus palabras).
Definitivamente no estaba bien enfocado, (para él era más fácil decir que no a la cena que había organizado su esposa que a los compromisos profesionales. Aunque la realidad era que quería estar con su familia más tiempo.
Al final de unas cuantas sesiones empezó a cambiar y a reorganizarse. A ser consciente de lo que tenía que hacer. A ser consciente de sus prioridades y de lo que quiere en esta vida.
Que quieres realmente
Para que la vida fluya en el sentido que nosotros queremos muchas veces hay que decir que NO. Y hay que saber a que y a quien le dices que no. Y eso es estar enfocado, es saber a lo que renuncias para tener lo que realmente quieres.
Conocer a qué estás renunciando, establecer tus prioridades, ser consciente de tus deseos y metas… te hará ser mucho más feliz.
Y de eso se trata, si realmente quieres aprender a decir que no, primero tienes que saber cuales son tus prioridades, tus valores, tu agenda.
Conoce tus valores
Conoce tus valores personales y tus valores sociales. Qué es importante para ti y qué no lo es. Qué te mueve en esta vida. Conocer los valores que te impulsan, hace que las cosas tengan más sentido y puedas ponerles el tiempo que corresponde.
A partir de allí sabrás establecer prioridades, sabrás que buscas a que renuncias y que aceptas en tu vida,
A qué y con quien quieres pasar el tiempo. El tiempo es inexorable. Las horas que has dedicado a este proyecto profesional es el que has renunciado para hacer otra cosa o estar con tu familia. Aprende a sopesar y a priorizar tu tiempo y tus actividades.
Un ejercicio de reflexión
Te invito a realizar un pequeño ejercicio para ver que tal andas. Son 10 minutos. Coge un papel en blanco y escribe que has hecho esta semana. Pon todas tus actividades, cenas, trabajos, etc. Te recomendaría que lo hagas tipo agenda para ver cuanto tiempo le has dedicado a cada una de ellas.
Ya has terminado. Ahora reflexiona acerca de estas actividades,
¿Están tus prioridades allí?
¿Lo que es importante para ti?
¿Lo que realmente deseas y quieres?
¿Era tu decisión lo que has hecho, o eran actividades de otros?
¿Para qué dedicas tiempo a esa amiga, vecino, compañero de trabajo, etc? ¿Tiene sentido para ti dedicarle ese tiempo?
¿es esta tu agenda, o es la agenda de los demás?
¿Qué es la agenda?
Cuando hablo de la agenda, no estoy hablando exclusivamente de esa agenda de papel o electrónica para apuntar tus actividades. Me refiere a la intención que hay detrás de cada una de las actividades que realizas.
Cuando sabes para que estás en este mundo, que quieres, que deseas, tus metas, tus sueños. Tu agenda se dirige hacia ello.
Por lo tanto no son los demás que ponen y organizan tu agenda según sus necesidades. Si no que tu organizas, decides y actúas según las tuyas.
La Magia de actuar con tu propia agenda
Cuando tienes claro cuál es tu agenda, nadie se enfada contigo (y si lo hacen te la repampinfla). Tú sabes para que estás aquí, sabes poner el qué o quien en prioridad ya que es tu elección, son tus valores, tus metas y tus sueños.
Te vuelves una persona más íntegra, no dices que si a unos, que no a otros, intentando contentar a todos y por tanto a ninguno. Dices que si a ti. A tu vida, a tus sueños, a tus deseos y a tu propósito de vida.
Cinco pautas para decir que no
Como decir que no, como empezar y no morir en el intento. El primer paso está en conocerte y hacer un trabajo de reflexión interna basado en VALORES y PRIORIDADES.
Una vez establecidos y teniéndolos claros viene el momento de poner en práctica el NO.
Aquí van cinco pautas para que puedas empezar a trabajar claramente con tu agenda.
#1.- No lo sé.
Está es una de mis respuestas preferidas y la utilizo muy a menudo. Posterga la respuesta cuando te pidan alguna cosa y veas que no está claro que pueda cumplir. Añade una explicación si crees que es necesario: te lo diré esta tarde ya que tengo que ver como va mi trabajo, en un par de semanas te lo confirmo ya que necesito saber X….
De esta manera te da tiempo a organizarte, ver tu agenda, saber si está en tus prioridades, tal vez es una actividad que realmente te apetece, lo que sea, etc…
Eso si, luego contesta en el plazo que te has comprometido.
#2.- Acepta que tú no vas a poder con todo
Ni puedes con todo ni tienes superpoderes. Quiérete, ámate y haz lo que realmente está en tu agenda y lo que consideras tus prioridades.
Los demás, cuando digas que sí, lo valorarán. Y si no lo hacen… pues allá ellos 😉
Esto pasa por trabajar esas famosas creencias que sobre todo en muchas mujeres y actualmente algunos hombres las han convertido en super-womans. Estresadas, frustadas y con la sensación de no llegar a nada y de ser como un pollo sin cabeza. Y últimamente veo cada vez más hombres también en esta tesitura.
¿Te sientes a sí? Entonces….Párate, Stop, haz realmente un parón para reflexionar poner las cosas en orden y volver con las ideas claras.
Lo que está claro, es que tú no puedes con todo. Piensa que cuando estás en la agenda del otro estás cargando tu agenda y también la del otro.
Por lo tanto: tu puedes con TUS cosas, lo que NO puedes es con las cosas de los demás.
#3.- Di que NO de una manera rotunda y contundente
Sin ser agresivo y sin excusas. Decir “no, es que no tengo tiempo” suena a excusa y el otro insistirá, o te hará sentir mal.
Decir “no, ahora no puedo, el martes de la semana que viene si que podemos vernos” suena mucho mejor.
Dar una alternativa, es una opción para ir cambiando poco a poco a ese foco en ti. Puede que lleves años diciendo que SI a todo. Ves planteando alternativas y planes de acción que te ayuden a decir que NO y encontrar una solución a una situación que te plantean.
#4.- La asertividad
Sé asertivo, sobre todo cuando el NO es sin alternativa.
Explica las razones, sin entrar en justificaciones. No entres en juicios de valor, ni en comparaciones. Eres TU, tu agenda, tus prioridades no te olvides.
Explica qué razones tienes y cual es la situación desde TU situación y ponte en su lugar para entender cómo decirle que NO.
#5.- Práctica
Práctica el NO. Hoy en día es fácil… en una tienda, vendedores callejeros, llamadas de teleoperadores.
Práctica el NO rotundo y el NO asertivo…. Practicando se mejora mucho 😊. Es como todo….
Y ahora con tanto NO en este post no te voy a pedir nada que no quieras hacer jejejeje…
Conclusión
Conócete para saber como decir que No. Valores y prioridades es parte esencial de este trabajo. Luego viene la práctica.
Cuéntame en los comentarios como te sientes cuando dices que NO, si ya has puesto en práctica algunas de estas pautas y qué ha pasado.
Quieres aprender a como decir que no, pídeme una sesión exploratoria gratuita y hablamos
Y si está en tu agenda ;)…. comparte en tus redes sociales, me ayudas a difundir todo este contenido. Graciassss 🙂
Un abrazo
Adriana, tu coach en el mar
+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++
También te puede interesar
10 estrategias para mejorar tu Gestion emocional
Gracias Adriana por el post. La verdad es que, en mi experiencia, lo mejor fue cuando me lancé a decir no y me di cuenta de que ¡NO PASA NADA! nadie me dejó de querer, ni de hablar, ni se cae el mundo, ni esa persona se muere por no estar yo ahí…toda una liberación.
Hola Bel!
Genial! efectivamente… un día dices NO y resulta que NO pasa nada. Cuando ese No está dicho desde la consciencia es liberador, sabes para que estás diciéndolo y como decirlo. Gracias por tu comentario. Un fuerte abrazo
Hola Adriana!
Cómo decir que no creo que es algo por lo que todos pasamos o estamos pasando.
Muchas veces, solo por el hecho de agradar, decimos que si a todo el mundo y como bien has expuesto, estamos llevando a cabo su agenda, no la nuestra.
Como experiencia quiero contar que en mi trabajo tengo un compañero que siempre me dice «Cris, tienes que aprender a decir que no porque no hay que estar siempre disponible para todo el mundo». Él me ha enseñado a decir que no en muchas situaciones y, la verdad, te sientes liberado. No había peor cosa que estar centrado en algo tuyo y que viniese alguien con «sus urgencias» a descentrarte.
Es muy complicado, es verdad; pero o aprendemos a decir que no o no podremos vivir nuestra propia agenda.
Un abrazo!
Hola Cristina! Genial, buen maestro fue tu compañero. Hay compañeros de trabajo que sólo saben vivir y trabajar en la urgencia, son adicto-urgentes. La cuestión está cuando te llevan a ti a su terreno. Tener clara tu agenda, tu trabajo y como convivir con ellos te va a facilitar mucho el trabajo y la relación con ellos. Un abrazo
Hola Adriana,
¿Cómo decir que no?.. al principio es hasta incomodo pero con la practica va resultando liberador e incluso divertido.
Cuando te conoces y conoces tus valores todo va hacia esa dirección, agenda incluida.
Me gustan las cinco pautas para decir que no.
Un abrazo
Virginia
Hola Virginia! Realmente decir que No, es como dices tú, liberador y hasta divertido si sabes tus para que. Gracias por tu comentario. Un abrazo
Gracias Adriana por hacernos reflexionar sobre las consecuencias de no saber decir NO, una creencia que todavía está muy arraigada en nuestra sociedad.
Como decir que no, la verdad es que al principio cuesta decirle que NO a una persona cuando te pide algo, pero si somos conscientes de que hacerlo es beneficioso para nosotras, para nuestro foco y cumplir nuestra agenda, que es la que nos llevara a conseguir la vida que deseamos es fácil hacerlo. Y la otra persona lo entiende, y si no lo entiende como dices allá ella.
Me gusta la estrategia que das de cuando decimos NO, buscar una alternativa, así la otra persona se irá dando cuenta que tenemos nuestra propia agenda, y podemos adaptarla a la de ella siempre y cuando decidamos hacerlo.
Priorizar en nosotras, querernos y mimarnos en todo momento y poner acción para respetarnos es lo que nos hará decir NO libremente y sin sentirnos culpables. Eso también hará que los demás nos respeten, y quizá comiencen a respetarse así mismos y a sus propias agendas también. ¿No crees?
¡Un fuerte abrazo!
Hola Mariví! efectivamente cuando empiezas a decir que No, de una manera empática, honesta y alineada contigo, cuando tienes clara tu agenda, tus prioridades sientes que aumenta el respeto hacia ti. Y eso es porqué tu has aumentando el respeto hacia ti misma. Y si, tal vez es una buena manera de empezar para que los demás te sigan, empezando por los que están en tu entorno. Un fuerte abrazo
De verdad que es muy importante saber o aprender como decir que no.
Hace ya un buen tiempo que lo practico y doy prioridad a las actividades de mi negocio y obviamente a compartir con las personas que yo quiero.
De todas formas voy a realizar el ejercicio que aconsejas a ver que tal estoy con este tema.
Muchas gracias por compartir
¡Un saludo!
Hola Serena! Enhorabuena por saber poner tus prioridades en orden. Es esencial para poder vivir plenamente alineada. Mientras tanto a continuar con tu agenda. Gracias por el comentario y tus palabras. Un abrazo
Adriana! Me encanta este tipo de artículos donde se nos enseña a decir no.
Hay que aprender a decir no a los demás y a cosas sin importancia y a decir SI a nosotros mismos. 😀
Al principio a mi me costaba un montón decir que NO, pensaba que era ser «grosero» o «descortés», también llegué a tener miedo de que la gente no me quisiera por decir que no, y por quedar bien con ellos quedaba mal conmigo misma.
Eso fue sobretodo cuando era una chica joven, pero hasta los 23 no aprendí la lección definitiva de mi vida cuando un ex-novio me prohibía de todo y no me dejaba ser quien yo era… Ahí aprendí no solo a decir NO, sino incluso decir basta.
Después ya me valió madres todo y decía sin ninguna vergüenza que NO jaja. Hacia lo que yo sentía que quería hacer, no lo que debía y estaba más alineada con mis valores.
Ahora soy una persona mucho más asertiva y también más feliz.
Tanto así que le dije NO a mi ex-jefe y a lo que la sociedad dice y hoy vivo la vida bajo mis propias reglas 😀
Hola Tania! Genial tu comentario!. Muchas gracias por pasarte por aqui y compartir tu experiencia. Me encanta ver como cada día hay más gente que se atreve a decir que no, que se atreve a vivir más alineada con sus valores y que disfruta de su vida y de cada uno de los momentos que el presente nos trae. Así el universo cada día está más lleno de energía positiva. Oleeeee Felicidades por esta energía tan linda que despides. Un placer tenerte por aquí. Un fuerte y caluroso abrazo!!!
Adriana que bien que hayas abordado este tema y nos regales tips para ponerlo en práctica, de todos, solo he usado el primero de decir “no lo sé”, y es que la verdad no siempre tenemos que saberlo todo y no necesitamos inventar las cosas para quedar bien con los demás, además este “no lo sé” te ayuda a revisar tu agenda y a poner en perspectiva las necesidades de otros frente a tus propias necesidades, decir que no quiere decir que conoces tus prioridades y que no te vas a postergar por complacer a los demás, siendo asertivo como lo has destacado sin tener que herir a nadie y sin acarrearte ese sentimiento de culpa que muchas veces nos queda por decir un simple no que muchas veces hasta nos cuesta pronunciar. Saludos.
Muchas gracias Eliana por tu comentario. Genial que el «no lo se» te haya servido para revisar agenda, para ponerte en perspectiva. Cuando tenemos claras las prioridades decir que no es cada vez más fácil… un abrazo